
Por Karen Gutierrez, Univision
Ciudad del Vaticano — 25 de diciembre de 2025
En su primer mensaje de Navidad como pontífice, el Papa León XIV hizo un llamado contundente a los fieles de todo el mundo para romper con la indiferencia ante el sufrimiento humano y asumir un compromiso activo con la paz, la justicia y la solidaridad.
Desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, ante unas 26,000 personas reunidas en la Plaza de San Pedro, el primer papa estadounidense ofreció su mensaje tradicional “Urbi et Orbi” —a la ciudad y al mundo— en el que abordó los conflictos, crisis humanitarias y desafíos sociales que afectan a la actualidad global.
Un mensaje de Navidad centrado en los más vulnerables
Durante su discurso, León XIV mencionó explícitamente a quienes “lo han perdido todo”, como los habitantes de Gaza; a los que viven en pobreza extrema, como el pueblo de Yemen; y a los migrantes y refugiados que cruzan el Mediterráneo o el continente americano en busca de un futuro mejor.
“Si cada uno se adentrara verdaderamente en el sufrimiento de los demás y se solidarizara con los débiles y oprimidos, el mundo cambiaría”, afirmó el pontífice, subrayando que la paz es responsabilidad no solo de los gobiernos, sino de cada individuo.
Regreso a una tradición y conexión con el público
León XIV retomó una tradición que había sido abandonada por su predecesor al ofrecer saludos navideños en varios idiomas. La multitud respondió con entusiasmo, especialmente cuando habló en inglés y español, este último idioma ligado a su experiencia como misionero y arzobispo en Perú.
Antes de retirarse, el papa fue despedido con vítores de “Viva el papa” y respondió con un afectuoso saludo, quitándose las gafas en un gesto cercano que marcó su primera Navidad al frente de la Iglesia católica.
Un repaso a los conflictos del mundo
En su mensaje, el pontífice pidió justicia, paz y estabilidad para Líbano, los territorios palestinos, Israel y Siria, y ofreció oraciones por “el pueblo atormentado de Ucrania”. También recordó a las víctimas de guerras, persecuciones religiosas, terrorismo e inestabilidad política en países como Sudán, Sudán del Sur, Malí, Burkina Faso y la República Democrática del Congo.
Asimismo, instó al diálogo para hacer frente a los desafíos en América Latina, promovió la reconciliación en Myanmar, la restauración de la relación entre Tailandia y Camboya, y expresó solidaridad con las comunidades afectadas por desastres naturales en el sur de Asia y Oceanía.
Migración, pobreza y trabajo digno
León XIV también dedicó parte de su mensaje a aquellos que sufren lejos de las zonas de guerra: personas que han perdido su empleo, jóvenes en busca de trabajo, trabajadores mal remunerados y personas detenidas.
Recordó que, al hacerse hombre, Jesús asumió la fragilidad humana y se identificó con los desposeídos, con quienes pasan hambre y pobreza, y con aquellos obligados a abandonar sus tierras natales.
Paz a través del diálogo
Horas antes, durante la misa de Navidad en la Basílica de San Pedro, el papa insistió en que la paz solo puede nacer del diálogo.
“Habrá paz cuando nuestros monólogos se interrumpan y, enriquecidos por la escucha, nos arrodillemos ante la humanidad del otro”, reflexionó en su homilía, recordando a los jóvenes obligados a empuñar armas y a las poblaciones civiles expuestas al frío, la lluvia y la violencia.
Cierre del Año Santo
Esta Navidad marca también el final del Año Santo, que concluirá el 6 de enero durante la festividad de la Epifanía. Miles de fieles abarrotaron la basílica, muchos de ellos capturando con sus teléfonos una Navidad histórica bajo el nuevo liderazgo del papa.
Con su primer mensaje navideño, León XIV dejó claro el tono de su pontificado: una Iglesia que no debe mirar hacia otro lado, sino comprometerse activamente con el dolor, la esperanza y la dignidad de todos.
Fuente original: Noticias Colorado
Por Karen Gutierrez
26 Dec, 2025




